La conciencia verde llega a las fiestas de matrimonio con las "ecobodas"

Fuente: El Mercurio

Rodrigo Salinas es un amante de la naturaleza. Trabaja en una empresa de energía renovable y cuando decidió comprometerse con su novia, Natalia Quiroz, tenía claro que quería una boda amigable con el ambiente.

La pareja se casó en enero de este año, en una parcela cerca de Limache, donde se preocuparon que cada detalle fuera lo más ecológico posible. "Queríamos intervenir lo menos posible en el medio ambiente del lugar", cuenta la novia. El matrimonio no sólo decidió utilizar todos sus adornos e invitaciones en papel reciclado, sino que también recicló cada uno de los desechos de la fiesta, y los convirtió en abono. Así como esta pareja, en el mundo son cientos las personas que están optando por una "ecoboda".

Esta tendencia nació en Inglaterra e invita a los novios a organizar sus casamientos reemplazando algunas alternativas tradicionales por otras más ecológicas. Por ejemplo: llevar trajes de novios reciclados o hechos con materiales naturales y no desperdiciar arroz al final de la boda. Los ecomatrimonios se realizan con la luz del día y al aire libre, para reducir el consumo de luz. En ellos no hay buffet -para no desperdiciar comida-, sino que cada plato, a base de alimentos orgánicos, se sirve directamente a la mesa y en vajilla reutilizable.

Los invitados llegan en bicicletas o un bus que los traslada, mientras que los novios usan un carruaje con caballos. En cuanto a los regalos, estos pueden ser ecológicamente amigables -y sin envolver para ahorrar papel-, o simplemente hacer un donativo a alguna organización. Acá esta tendencia aún se encuentra en pañales. Lizana Producciones es de los pocos que organiza estas ceremonias.

"Hemos tenido matrimonios en la playa, al lado de un arroyo, y con todo naturista y reciclado, y siempre nos preocupamos de reciclar cada desecho", dice Gary Lizana, dueño de la empresa. Patricia Solís, directora de Bianco Novios, también ha visto cómo lentamente las parejas han ido incorporando algunas de estas ideas, incluso ella misma está pensando en utilizarlas en su propio casamiento. "Es una manera de hacer un aporte a la naturaleza y, en mi caso, no es que todo vaya a ser ecológico, pero sí aportaré con pequeños detalles", explica.

Por ejemplo, piensa regalar una pequeña araucaria a sus invitados. "La idea es que ellos las planten, y así tengan un recuerdo lindo de nosotros y puedan verla crecer". Más allá de su propio matrimonio, Patricia también incluye elementos ecológicos en las fiestas que organiza, como dar la opción de vender los trajes de novia o enviar las invitaciones a través de una plataforma de internet. Para los que siguen prefiriendo el romanticismo de las invitaciones, está la alternativa del papel reciclado. "Como los matrimonios han cambiado y ya no son tan rígidos como antes, se puede jugar mucho con los colores y los diseños para las invitaciones en este tipo de papel, el que también se usa para muchas otras cosas como recuerdos, distribución de mesas, libros de dedicatoria, álbumes de foto", explica Julio Donoso, de la empresa Arteenpapel.

Otra posibilidad son los vestidos de novia tejidos a crochet y fabricados con materiales naturales. Un trabajo a la medida que demora cerca de ocho semanas, y cuyos precios no se alejan de los tradicionales.

"En el último tiempo, estoy teniendo hartos pedidos, porque es un trabajo a mano a partir de algodón macerizado, que le da un brillo especial, con seda", dice Pilar Carrasco, quien ofrece sus modelos en internet. Banquetes orgánicos Según Adolfo Cartagena, de Banquetes y Flores, en Chile la tendencia de los banquetes orgánicos aún es escasa. "Son súper difíciles, primero por un tema de costo, porque los chilenos prefieren no usar lo que pueda hacer subir el costo. Y segundo, porque están acostumbrados a la carne".

Fuente: El Mercurio